...no hay que hacer caso a nadie en cuanto a las predicciones para el próximo año. Estudiosos como Faber aseguran que tendremos suerte si en 5 años conservamos la mitad de nuestro patrimonio. Él certifica que los bonos soberanos van a colapsar basándose en que los Bancos Centrales están devaluando sus propias monedas para recapitalizar a la banca y reactivar la economía. Si esto ocurriera, veríamos una situación irónica: los ahorradores más convencionales serían los más perjudicados (compradores de letras, con aversión a la bolsa). Nosotros, como estudiosos de la gestión de riesgos, cada día nos damos más cuenta de que el riesgo está escondido y no solo se mide con la volatilidad en escenarios "normales" (no dejen de leerse El Cisne Negro de Nassim Taleb, aquí enlace para resumen). Pero esta no es la única opinión.
Otros piensan que la bolsa está baratísima en términos de cash flow (nosotros diferimos, regalada no está, lo bueno está en máximos históricos) o baratísima por comparación con otros instrumentos. Este segundo punto es quizá el más interesante. No hay alternativa a la bolsa en términos de rentabilidad ahora mismo. Los dividendos son superiores a los cupones y, en algún sentido, más seguros. Al fin y al cabo, somos dueños de un negocio rentable con un razonable ROE (Return on Equity). Recientemente hemos publicado un enlace en Twitter para recordar qué pasó en los momentos del corralito argentino: por comparación, la bolsa no salió mal parada. Como los extremos se tocan, existen analistas que esperan que el 2012 sea uno de los años más espectaculares de bolsa.
Todo esto lo veremos. Nosotros, como siempre, intentamos diversificar de forma real a través de varios escenarios que nos permitan flotar sobre las eventualidades. En momentos como los que estamos viviendo, hablar de rentabilidades es no estar entendiendo los riesgos que nos acechan: solo concebimos hablar de preservación de patrimonio.
Otros piensan que la bolsa está baratísima en términos de cash flow (nosotros diferimos, regalada no está, lo bueno está en máximos históricos) o baratísima por comparación con otros instrumentos. Este segundo punto es quizá el más interesante. No hay alternativa a la bolsa en términos de rentabilidad ahora mismo. Los dividendos son superiores a los cupones y, en algún sentido, más seguros. Al fin y al cabo, somos dueños de un negocio rentable con un razonable ROE (Return on Equity). Recientemente hemos publicado un enlace en Twitter para recordar qué pasó en los momentos del corralito argentino: por comparación, la bolsa no salió mal parada. Como los extremos se tocan, existen analistas que esperan que el 2012 sea uno de los años más espectaculares de bolsa.
Todo esto lo veremos. Nosotros, como siempre, intentamos diversificar de forma real a través de varios escenarios que nos permitan flotar sobre las eventualidades. En momentos como los que estamos viviendo, hablar de rentabilidades es no estar entendiendo los riesgos que nos acechan: solo concebimos hablar de preservación de patrimonio.