La velocidad del dinero es el número de veces que se realiza un transacción con el dinero. Ejemplo:
- Camarero recibe 3 euros de propina, coge un taxi y usa estos 3 euros para pagar el taxi, el taxi para en un bar y se compra un bocadillo con estos 3 euros: velocidad 3.
- Cliente no da al camarero la propina, se vuelve a casa a ver Juego de Tronos: velocidad 0.
La evolución de la velocidad del dinero es muy psicológica y de difícil manipulación. Los gobiernos están intentando aumentarla situando los tipos de interés en territorio negativo: si dejo el dinero en el banco, tengo que PAGAR intereses. Su lógica se basa en que para evitar esta situación, el ciudadano va a usar su dinero. Equivocados. No se han leído a Bastiat y sus "consecuencias inesperadas" (enlace aquí en inglés). Lo que en realidad está ocurriendo es todo lo contrario:
1. El ciudadano ha incrementado el ahorro para suplir la ausencia de intereses.
2. El ciudadano se asusta ante la excepcionalidad de los tipos de interés negativos y se vuelve más prudente.
3. Los tipos de interés negativos demuestran deflación, por lo que se presume que se podrán comprar los bienes deseados más adelante a un precio inferior y se demora la compra.
Al final, el resumen es que se puede "llevar el caballo al río pero no se le puede obligar a beber".