21.4.08

Quiero retirarme

Siguiendo la línea de "Papá rico", uno se plantea la necesidad de obtener libertad financiera y de tiempo. La libertad implica no depender del trabajo, tener los bienes suficientes para vivir de forma holgada (cada persona marca los límites), no esperar a la jubilación, tener capacidad para establecerse en cualquier parte del mundo... Es un concepto obvio, pero relativamente nuevo en España. En USA se viene tratando desde hace algunos años, quizás debido a que el boom inmobiliario hizo a mucha gente rica y éstos se preguntaron por qué trabajaban si ya no lo necesitaban.

La libertad financiera tiene que ir unida necesariamente a la libertad de tiempo. La idea es: estoy blindado económicamente y si trabajo en algo es porque quiero, porque me da placer crear, pero sin necesitarlo.

Retirarse no es tan sencillo como parece pues existen muchas incertidumbres en el futuro que hacen que el "rentismo" o la inversión no sean matemáticamente seguros. Primero hay que visualizar la nueva situación, desearlo de verdad para poder utilizar todas las herramientas a nuestra disposición para lograrlo. Marcar una fecha límite para no necesitar el trabajo es un motivante muy necesario. Segundo, calcular cuál es la mínima cantidad de dinero/bienes necesaria. Echen una ojeada a este calculador. Tercero, conseguir el dinero y, cuarto, colocarlo.

Todo depende de nuestro perfil. Por ejemplo, podría preparme para vivir en Vietnam (país encantador por otro lado) o Argentina por poco dinero al mes, por lo que la cantidad inicial necesaria podría ser mucho más baja, o, por el contrario, asumir un retiro a lo grande entre NY, Suiza y Dubai. Los bonos del Tesoro pueden ser una opción si me quedaran pocos años de vida y pudiera asumir perder la inflación y despatrimonializarme, pero no es el perfil que estamos buscando con este artículo. Al final todo termina siendo una combinación de factores, riesgos, inversiones e incertidumbres. Si realmente tuviéramos certeza del futuro, no diversificaríamos pues iríamos directamente al producto más rentable. En general esto no es así, por lo que nos vemos obligados a utilizar diversas fuentes de cash flow: acciones, vivienda, negocios, renta fija... Lo que sí podemos hacer es acertar con buenos productos dentro de estas áreas. Recordemos que estamos buscando una inversión estable, de largo plazo, por lo que, por ejemplo, acciones de compañías no rentables debieran estar descartadas o viviendas con fuertes taras también.

Es una labor ardua, pero merece la pena. Y recordemos las palabras de mi libro favorito: "el que nada busca, todo lo encuentra".