29.8.09

Confiamos en el ser humano

Se temía una volatilidad altísima en las bolsas este verano. No ha sido así. Todo ha transcurrido plácidamente. El catedrático Santiago Niño Becerra nos preparaba para unas vacaciones apocalípticas. Tampoco ha ocurrido: algo menos de dinero, así que usamos los bienes familiares. El ser humano es sorprendente y, pese a la crisis, buscará resquicios para salir adelante. Las predicciones de los profesores de economía que han acertado hasta ahora tienen un valor, pero, como se suele decir en los fondos de inversión, rentabilidades (aciertos) pasadas no implican rentabilidades (aciertos) futuras. No hay que creerse a pies juntillas a nadie.

La bella saltadora de pértiga Isinbayeva sorprendentemente no superó el corte en los Mundiales de Berlín. En un brevísimo tiempo se ha recuperado y ayer batió el record del mundo otra vez. ¿No es increíble?

Bernanke puede haber comenzado a drenar dinero del sistema de forma discreta. ¿Realmente pensamos que no sabe lo que hace? Saberlo lo sabe, otra cosa bien distinta es que sus intereses no se encuentren alineados con el bien común.

Las empresas ya se están preparando para la fuerte cantidad de bajas por la gripe A que esperamos este invierno. Turnos más flexibles, teletrabajo temporal... Quizá pueda ser un buen momento para retocar distintos procedimientos internos. Aunque no esté relacionado con la gripe, Utah ha sido existosa en conseguir un día más para el fin de semana: más horas de L a J y 3 días libres. No hay que tener miedo a la realidad: al trabajador dale objetivos y déjale que viva bien. Seguimos confiando en el ser humano.

29/08/2009